Campana se encuentra entre dos adyacencias: de las cuencas hídricas secundarias del Paraná, y de la Ruta Nacional N°9, por donde pasa el 70% de las riquezas nacionales. La presencia de complejos siderúrgicos y metalmecánicos como Siderca y Techint, y otros como la cementera Minetti, nos permiten contar con técnica avanzada en el lugar.
El proyecto se implanta en un terreno esbelto frente al Parque Urbano Ing. Roberto Rocca. Los usos públicos se encuentran en planta baja con independencia programática y estrecha relación entre sí. La circulación estratifica el programa por niveles intercalados, rematando en anaqueles como promenade cenital. A medida que sube dentro de tres tabiques macizos, el peatón se somete a antagónicas tensiones de diversas espacialidades, para ser liberado repentinamente dentro de la sala de lecturas con visuales hacia el parque y bajo lucarnas dispuestas según los solsticios del lugar. Los núcleos circulatorios presentan escaleras semicubiertas y están ubicados a una distancia menor de 40 m entre sí. La voluntad centrífuga posiciona el ascensor hidráulico sobre la fachada.
El nivel vehicular semienterrado complementado con bicicleteros nos permite la autosuficiencia programática exigida en bases. Una ventana corrida abre totalmente hacia el norte bajo una considerable viga-dintel de 70 metros de luz. Este plano se pliega en las caras cortas encerrando y delimitando en los bordes del lote, con sus disposiciones espaciales presentadas longitudinal y perpendicularmente a la vía circulatoria principal de la ciudad. Dentro de esta envolvente, diversos estrangulamientos con piezas circulatorias independientes brindan una fluidez espacial interna. Finalmente, el volumen a dos aguas es intangible y existente.
“Las configuraciones de campo son conjuntos ligeramente vinculados, caracterizados por su porosidad y conexión local. Las regulaciones internas de las partes son decisivas, sobre todo si su forma tiene alta fluidez”, Stan Allen.
Asociado: Arq. Luis Fernando Palenque.